La Asociación Castellano Leonesa de Ayuda a Familiares y Enfermos de Bulimia y Anorexia, ACLAFEBA, sigue trabajando día a día por dar voz a los trastornos de la conducta alimentaria. Coincidiendo con el Día Mundial de los TCA (Trastornos de la Conducta Alimentaria), el pasado 30 de noviembre, la entidad aprovechó para lanzar un mensaje de compromiso con esta enfermedad.
Así, la Cúpula del Milenio de Valladolid se iluminaron de azul y Autobuses Urbanos de Valladolid, S. A. (AUVASA) también apoyaron la iniciativa luciendo en su frontal delantero el hashtag que se ha fijado para la causa ACLAFEBA -LUCHA TCA.
Tenemos que partir del profundo desconocimiento que existe entre la población sobre determinados conductas relacionadas, a priori, con la imagen y con la cantidad, calidad y tipo de comida que ingiere la persona afectada, y que lejos de quedarse en una cuestión de tallas encierra la existencia de una difícil gestión de pensamientos y comportamientos respecto a cómo nos relacionamos con los demás o con nosotros mismos. Las personas afectadas en mayor o menor medida por un TCA se rigen, en la misma medida, por un intento de control “El control que, en sus distintas variantes, el paciente tiene con la comida no es más que un canal para descargar el sufrimiento interno y continuo de quién padece esta enfermedad que está relacionada con la perfección en distintas esferas de la vida cotidiana, la excesiva auto-exigencia, una baja autoestima, el miedo a no ser aprobados por los demás, la depresión, ansiedad, aislamiento...”señalan desde ACLAFEBA, asegurando que “tratar este tipo de enfermedades sólo desde el punto de vista de la imagen que se quiere alcanzar es un error porque no se trata de tallas o de alcanzar un determinado físico, es mucho más, y ya partimos de que la propia sociedad, por falta de información, de sensibilización y concienciación, sólo ve la parte superficial de la enfermedad, proyectando incluso cánones en relación con lo que nosotros creemos que deberíamos de ser, lo que provoca una continua sensación de no cumplir la expectativas de los demás.
En el caso de la anorexia, por ejemplo, en muchos casos es una forma de saber que controlan al máximo algo, su hambre y su peso cada vez más bajo. En caso de trastornos por atracón, ingestas compulsivas de comida y bulimia intentan controlar a su vez la cantidad de comida como vía de escape, consuelo o simplemente paliar una sensación de soledad, aburrimiento o no aceptación de circunstancias personales, familiares o sociales que afectan a quien lo padece.
Para las familias, incluso para los mismos enfermos es difícil reconocer que se tiene este tipo de trastorno “Los pacientes, a pesar de sufrirlo, en muchos casos o no lo reconocen, negándose a admitir la existencia de un problema o bien, aun padeciéndolo, tratan de solucionarlo en silencio, ocultando sus conductas a las personas que tienen a su alrededor” matiza la presidenta de ACLAFEBA.
En este contexto, y en el marco de la celebración del Día Mundial de los TCA, la asociación ha redactado un decálogo agrupando diversas conductas relacionadas con la comida y con las consecuencias en el comportamiento del afectado, señales de alarma que pueden indicar si una persona padece un Trastorno de la Conducta Alimentaria y si está en riesgo de sufrirlo, conductas que si bien puede darnos una pista no confirman la enfermedad. Para diagnosticarla es indispensable que la persona que parece estar sufriéndola sea evaluada por profesionales de la salud.
- ACLAFEBA es un referente en Castilla y León para el tratamiento del Trastorno de la Conducta Alimentaria
Decálogo para estar alerta ante casos de TCA
1. Pérdida importante de peso en un corto espacio de tiempo.
2. Seguimiento de dietas restrictivas aun estando delgado (lucha constante por mantener el peso por debajo de lo normal), miedo y rechazo exagerado al sobrepeso.
3. Tendencia al ejercicio físico excesivo.
4. Ritos con la comida: contar calorías, preparar comida para otros y no probarla, ocultarla, tirarla, etc...
5. Obsesión por la comida, comer de forma descontrolada o compulsiva en forma de atracones.
6. Abuso de laxantes y diuréticos.
7. Vómitos provocados (ir al baño después de las comidas), consecuencia de los vómitos: malformaciones en los dedos, problemas dentales.
8. Pérdida de la menstruación (Amenorrea) como síntoma de desnutrición.
9. Tendencia al aislamiento social, a los cambios de humor, sentimientos de culpa y comportamientos contradictorios.
10. Baja autoestima y auto desprecio.
¿Cómo podemos ayudar a una persona que nos preocupa? “Es importante ser directo y comprensivo, no tratar de manipular, culpabilizar o intentar controlar a la persona afectada, no hacer juicios de valor en torno al comportamiento anómalo que ha observado pero si mostrar su preocupación y apoyo, decirle que está dispuesto a hablar del problema cuando quiera y en el momento que considere oportuno, decir al que lo sufre que debería pedir ayuda, que podemos acompañarle, hacerle saber dónde puede llamar para solicitar información o profesional al que consultar o asociación donde puede dirigirse. Esta enfermedad se sufre en silencio durante mucho tiempo, tardas en tomar conciencia de ella y lo difícil es exteriorizarlo, compartirlo con los seres queridos, pedir ayuda profesional y enfrentarte a este trastorno psicológico que cada vez afecta a mayor número de personas (de distintas edades, de ambos sexos y con diferentes manifestaciones). Trastorno que se supera si el afectado se responsabiliza de su comportamiento, busca y acepta ayuda y cambia su relación con la comida”declara su presidenta.
En la actualidad, ACLAFEBA trata alrededor de unos 80 pacientes y a sus familiares, posicionándose así como un referente en Castilla y León en el tratamiento de la enfermedad por sus métodos de tratamiento, la profesionalidad de los terapeutas y los resultados constatados hasta la fecha, teniendo en cuenta la falta/escasez de profesionales en la sanidad pública especializados en el tema, generalmente abordado como un trastorno estrictamente psiquiátrico sin ayuda psicológica y nutricional continuada en el tiempo para que el paciente llegue a tener una relación normalizada y sana con la comida.
ACLAFEBA ofrece asistencia integral tanto a los pacientes que presentan trastornos de la conducta alimentaria como a sus familiares, mediante un abordaje bio-psico-social del problema a través de un equipo multidisciplinar especializado en los ámbitos de la Psiquiatría, Psicología, Trabajo Social y Nutrición, con la participación activa de los propios enfermos y sus familiares en las distintas terapias que brinda la asociación, desde la que se ofrece una información telefónica y presencial sin compromiso a quienes quieran acercarse a ella y una asistencia integral necesaria para que el afectado adquiera un hábito alimenticio saludable.