
El vino, una bebida que ha sido apreciada por siglos en todo el mundo, es el resultado de una cuidadosa combinación de tierra, clima, tradición y pasión. En España, la tradición vinícola es rica y diversa, y una de las joyas que destaca en este ámbito es Aranda de Duero, una pequeña pero influyente ciudad burgalesa ubicada en la región vinícola de Ribera del Duero.
Una historia que se remonta a siglos atrás
La historia vinícola de Aranda de Duero es fascinante y se remonta a la época romana. Los romanos fueron los primeros en darse cuenta del potencial de esta tierra para la viticultura, y sus viñedos se extendieron por toda la región.

Sin embargo, fue durante la Edad Media cuando la industria del vino en Aranda de Duero comenzó a florecer. Durante los siglos XII y XIII se convirtió en uno de los principales productores del centro de España.
- El papel de las ferias: Aranda de Duero y otras ciudades de la región celebraban ferias medievales que atraían a comerciantes y viajeros de toda Europa. En estas ferias, el vino era uno de los productos más destacados y se vendía en grandes cantidades. Las ferias también eran momentos de festividad y alegría, con música y entretenimiento que acompañaban la degustación de vino.
- La evolución de las botellas y etiquetas: Durante la Edad Media, los métodos de embotellado y etiquetado de los vinos eran bastante rudimentarios en comparación con los estándares modernos. Las botellas solían ser de vidrio soplado a mano y las etiquetas distaban de las etiquetas detalladas que conocemos hoy. Esto, a veces, conducía a la confusión en cuanto a la procedencia y la calidad del vino, lo que generaba disputas entre compradores y vendedores.
- El vino en la gastronomía medieval: En la cocina medieval, el vino no solo se consumía como bebida, sino que también se usaba en la preparación de alimentos. Se utilizaba en salsas, guisos y marinadas, y se consideraba un ingrediente esencial en muchas recetas. Esta práctica culinaria influyó en el desarrollo de sabores y técnicas de cocina de la región.
- El vino y la nobleza: El vino de alta calidad se considera un signo de estatus y riqueza. La nobleza medieval de Aranda de Duero a menudo competía por tener las bodegas más impresionantes y los vinos más exquisitos. Esto llevó a un aumento en la inversión en la producción de vino y al perfeccionamiento de las técnicas de vinificación.
- Era común que los señores feudales recibieran parte de su tributo en forma de vino. Además, el vino se utilizaba en acuerdos comerciales y como moneda de cambio en transacciones comerciales.
- En la Edad Media, los viñedos eran considerados una fuente de riqueza y estaban sujetos a estrictas regulaciones. Los propietarios de tierras solían ceder parcelas para el cultivo de uvas a cambio de una parte de la producción. Las disputas y conflictos sobre la propiedad de viñedos eran comunes y a menudo se resolvían en los tribunales locales.
- El vino y la iglesia: El vino desempeñaba un papel importante en las celebraciones religiosas de la época. Durante la misa, se convertía en el «vino sagrado» a través de la consagración, y se ofrecía a los fieles como el cuerpo y la sangre de Cristo. Esto impulsó aún más la producción de vino y su importancia en la vida cotidiana.
La denominación de origen "Ribera del Duero"
Hoy en día, Aranda de Duero es parte de la prestigiosa Denominación de Origen Ribera del Duero, fundada oficialmente en 1982 y que engloba una serie de localidades en la región del centro de España. Esta denominación es conocida por producir algunos de los vinos tintos más aclamados del país. La combinación de un clima continental extremo, con inviernos fríos y veranos calurosos, y la tierra rica en minerales, proporciona las condiciones ideales para el cultivo de la uva "Tempranillo", la variedad predominante en la región.
La magia de las bodegas subterráneas
La histórica ciudad de Aranda de Duero es conocida no solo por su exquisito vino tinto, sino también por un tesoro oculto bajo sus calles: las bodegas subterráneas.
Estas impresionantes estructuras subterráneas se han convertido en un símbolo de la rica tradición vinícola de la región y en un atractivo turístico que te sumerge en la magia del vino y la historia. Tienen sus raíces en la Edad Media. Los monasterios y las familias nobles de la zona comenzaron a cavar estas bodegas en la roca caliza que subyace a la ciudad para almacenar y envejecer sus preciados vinos. Estas construcciones subterráneas eran ideales para mantener una temperatura constante y adecuada para la crianza del vino, además de protegerlo de la luz y las fluctuaciones de temperatura.
Construidas a una profundidad de entre 8 y 12 metros, estas bodegas son un testimonio de la creatividad y la sabiduría de los viticultores locales. En la actualidad se conservan entre 140 y 147 bodegas, la mayoría de ellas de uso privado.
Forman un entramado de 7 km de galerías bajo el casco urbano. Excavadas en la tierra entre los siglos XII y XVIII, estas bodegas ofrecen un entorno único y natural para el envejecimiento del vino. Algunas están comunicadas entre sí permitiendo la ventilación y, en ocasiones, el acceso de una nave a otra. Con pasillos estrechos, techos abovedados y paredes de piedra, te sumerges en un mundo subterráneo que parece sacado de un cuento de hadas. La luz tenue que se filtra a través de las pequeñas aberturas crea un ambiente mágico que realza la experiencia.
Las peñas arandinas, grupos de amigos y amantes del vino que se reúnen de manera regular para disfrutar y compartir su pasión por el vino, han desempeñado un papel importante en el mantenimiento y la promoción de las bodegas en Aranda de Duero.
Con su rica historia vinícola, bodegas subterráneas únicas y una pasión arraigada por la viticultura, Aranda de Duero es un destino imprescindible para los amantes del vino que deseen explorar la tradición vinícola española. Así que, si tienes la oportunidad, no dudes en visitar esta encantadora ciudad. Te aseguramos que será una experiencia inolvidable llena de sabor y tradición.

Adrada de Haza, 26 de octubre de 2023
Publicada por Adrada Bodega y Viñedos en su blog
Adrada Bodega y Viñedos, hoy dirigida por Maite Perera, destaca como una de las bodegas pioneras en la producción de vinos y viñedos ecológicos en la región de la Ribera del Duero. Fundada en el año 2000, la empresa gestiona 9 hectáreas de viñedos de la variedad de uva Tempranillo, manteniendo un fuerte compromiso con la preservación del medio ambiente.
Ubicada en Adrada de Haza (Burgos) en el marco de la denominación de origen Ribera del Duero, Adrada Bodega y Viñedos ha consolidado un proyecto sostenible, dando origen a un nuevo apasionante vino denominado "Cuatro Corazones". A su vez, conserva la tradición con su vino ecológico "Kirios de Adrada noche", cuya primera cosecha data del año 2001.
Algunos datos sobre Aranda de Duero

- Datos demográficos
- Evolución de la población desde 1900 hasta 2023
Segun los datos publicados por el INE a 1 de Enero de 2023 el número de habitantes en Aranda de Duero es de 33.626, 454 habitantes mas que el en el año 2022. Actualmente la densidad de poblacion en Aranda de Duero es de 264,20 habitantes por Km2
En el grafico y la tabla siguientes se pueden ver cuantos habitantes tiene Aranda de Duero a lo largo de los años, desagregados entre hombre y mujeres

| Evolución de la población desde 1900 hasta 2023 | |||
| Año | Hombres | Mujeres | Total |
| 2023 | 16.349 | 17.277 | 33.626 |
| 2022 | 16.123 | 17.049 | 33.172 |
| 2021 | 16.021 | 17.063 | 33.084 |
| 2020 | 16.064 | 17.123 | 33.187 |
| 2019 | 15.941 | 16.915 | 32.856 |
| 2018 | 15.805 | 16.718 | 32.523 |
| 2017 | 15.833 | 16.702 | 32.535 |
| 2016 | 15.904 | 16.717 | 32.621 |
| 2015 | 16.055 | 16.825 | 32.880 |
| 2014 | 16.183 | 16.882 | 33.065 |
| 2013 | 16.364 | 16.893 | 33.257 |
| 2012 | 16.519 | 16.940 | 33.459 |
| 2011 | 16.460 | 16.769 | 33.229 |
| 2010 | 16.462 | 16.692 | 33.154 |
| 2009 | 16.444 | 16.484 | 32.928 |
| 2008 | 16.248 | 16.212 | 32.460 |
| 2007 | 15.994 | 15.946 | 31.940 |
| 2006 | 15.769 | 15.776 | 31.545 |
| 2005 | 15.605 | 15.642 | 31.247 |
| 2004 | 15.417 | 15.458 | 30.875 |
| 2003 | 15.342 | 15.364 | 30.706 |
| 2002 | 15.133 | 15.176 | 30.309 |
| 2001 | 14.960 | 15.039 | 29.999 |
| 2000 | 14.840 | 14.922 | 29.762 |
| 1999 | 14.804 | 14.893 | 29.697 |
| 1998 | 14.765 | 14.876 | 29.641 |
| 1996 | 14.517 | 14.702 | 29.219 |
| 1995 | 15.161 | 15.270 | 30.431 |
| 1994 | 15.211 | 15.264 | 30.475 |
| 1993 | 15.141 | 15.142 | 30.283 |
| 1992 | 14.970 | 14.952 | 29.922 |
| 1991 | 14.928 | 14.886 | 29.814 |
| 1990 | 14.764 | 14.536 | 29.300 |
| 1989 | 14.726 | 14.485 | 29.211 |
| 1988 | 14.643 | 14.426 | 29.069 |
| 1987 | 14.452 | 14.224 | 28.676 |
| 1986 | 14.387 | 14.165 | 28.552 |
| 1981 | 0 | 0 | 27.598 |
| 1970 | 0 | 0 | 18.369 |
| 1960 | 0 | 0 | 13.454 |
| 1950 | 0 | 0 | 10.393 |
| 1940 | 0 | 0 | 9.168 |
| 1930 | 0 | 0 | 7.788 |
| 1920 | 0 | 0 | 6.462 |
| 1910 | 0 | 0 | 5.729 |
| 1900 | 0 | 0 | 5.736 |
- Población extranjera inmigrante
Segun los datos ofrecidos por el INE en la estadistica del Padrón los habitantes empadronados en Aranda de Duero que han nacido en otros países ascienden a 5.071.
- 2541 habitantes, 1010 hombres y 1531 mujeres nacidos en América.
- 864 habitantes, 520 hombres y 344 mujeres nacidos en África.
- 123 habitantes, 70 hombres y 53 mujeres nacidos en Asia.
- 1 hombre nacido en Oceanía.
| Habitantes segun Pais de Nacimiento | |||
| Pais | 2022 | Dif (2021) | |
| Bulgaria | 567 | -12 | |
| Francia | 76 | 6 | |
| Italia | 22 | 3 | |
| Polonia | 18 | 3 | |
| Portugal | 78 | 2 | |
| Reino Unido | 30 | 3 | |
| Alemania | 32 | -1 | |
| Rumanía | 568 | 11 | |
| Ucrania | 32 | -6 | |
| Rusia | 10 | -2 | |
| Argelia | 35 | 3 | |
| Marruecos | 691 | 91 | |
| Nigeria | 4 | 1 | |
| Senegal | 21 | 8 | |
| Cuba | 39 | 3 | |
| República Dominicana | 130 | -3 | |
| Argentina | 62 | 4 | |
| Bolivia | 19 | 3 | |
| Brasil | 106 | -7 | |
| Colombia | 878 | 81 | |
| Chile | 11 | 4 | |
| Ecuador | 276 | -10 | |
| Paraguay | 56 | 8 | |
| Perú | 77 | 8 | |
| Uruguay | 5 | 1 | |
| Venezuela | 117 | 23 | |
| China | 64 | -1 | |
| Pakistán | 26 | 1 | |
| Otros | 1021 | 18 | |

Estructura por sexo y grupos de edad de la población de Aranda de Duero en 2022
| Población de Aranda de Duero por sexo y edad 2022 (grupos quinquenales) | |||
| Edad | Hombres | Mujeres | Total |
| 0-5 | 644 | 670 | 1.314 |
| 5-10 | 837 | 778 | 1.615 |
| 10-15 | 869 | 831 | 1.700 |
| 15-20 | 805 | 758 | 1.563 |
| 20-25 | 812 | 782 | 1.594 |
| 25-30 | 835 | 805 | 1.640 |
| 30-35 | 887 | 925 | 1.812 |
| 35-40 | 1.047 | 1.077 | 2.124 |
| 40-45 | 1.304 | 1.301 | 2.605 |
| 45-50 | 1.286 | 1.347 | 2.633 |
| 50-55 | 1.224 | 1.233 | 2.457 |
| 55-60 | 1.119 | 1.258 | 2.377 |
| 60-65 | 1.119 | 1.147 | 2.266 |
| 65-70 | 946 | 987 | 1.933 |
| 70-75 | 817 | 923 | 1.740 |
| 75-80 | 677 | 809 | 1.486 |
| 80-85 | 445 | 524 | 969 |
| 85- | 450 | 894 | 1.344 |
| Total | 16.123 | 17.049 | 33.172 |
La poblacion menor de 18 años en Aranda de Duero es de 5.612 (2.871 H, 2.741 M ), el 16,9%.
La poblacion entre 18 y 65 años en Aranda de Duero es de 20.519 (10.132 H, 10.387 M ), el 61,9%.
La poblacion mayor de 65 años en Aranda de Duero es de 7.041 (3.120 H, 3.921 M ), el 21,2%.
| Evolución Nacimientos y Defunciones desde 1996 hasta 2022 | |||
| Año | Nacimientos | Fallecidos | Diferencia |
| 2022 | 241 | 339 | -98 |
| 2021 | 228 | 281 | -53 |
| 2020 | 236 | 386 | -150 |
| 2019 | 285 | 285 | 0 |
| 2018 | 262 | 321 | -59 |
| 2017 | 259 | 315 | -56 |
| 2016 | 288 | 286 | 2 |
| 2015 | 330 | 277 | 53 |
| 2014 | 299 | 324 | -25 |
| 2013 | 346 | 255 | 91 |
| 2012 | 325 | 287 | 38 |
| 2011 | 345 | 304 | 41 |
| 2010 | 399 | 244 | 155 |
| 2009 | 326 | 254 | 72 |
| 2008 | 370 | 254 | 116 |
| 2007 | 281 | 245 | 36 |
| 2006 | 328 | 240 | 88 |
| 2005 | 293 | 242 | 51 |
| 2004 | 305 | 210 | 95 |
| 2003 | 231 | 218 | 13 |
| 2002 | 284 | 204 | 80 |
| 2001 | 260 | 230 | 30 |
| 2000 | 261 | 197 | 64 |
| 1999 | 262 | 228 | 34 |
| 1998 | 277 | 243 | 34 |
| 1997 | 266 | 235 | 31 |
| 1996 | 257 | 212 | 45 |
- Datos históricos
En el centro de la extensa vega que riega el río Duero, se encuentra la capital de la no menos extensa comarca de la ribereña: Aranda de Duero.

Repoblada en el siglo IX, el nombre de esta ciudad castellana aparece por primera vez en el Concilio de Husillos celebrado en el año 1088. Sin embargo tuvo ya poblaciones antiquísimas de cuyas lenguas toma su nombre, Aranda que significa precisamente «vega amplia» y del río el sobrenombre de Duero. Lugar de realengo, ya en el siglo XIII la villa había obtenido de Sancho IV y Pedro I el privilegio de su condición de realenga, condición a la que nunca quisieron renunciar los arandinos. De ello dieron pruebas cuando, durante la minoría de edad de Fernando IV, Diego López de Haro quiso hacerse con la villa. La torre de la iglesia de Santa María, levantada en el siglo XII como elemento defensivo de la población, es testigo de aquellas intrigas cortesanas.
Corte en el reinado de Enrique IV, en ella el arzobispo Alfonso Carrillo convocó un Concilio el año 1473, celebrado en la iglesia de San Juan. Leal la villa a la causa de la princesa Isabel pare la sucesión a la corona, es en esta época cuando, a finales del siglo XV, comienzos del XVI, se realizan, entre otras obras, la portada de la iglesia de Santa María, en la que lucen los escudos reales. En el centro de la extensa vega que riega el río Duero, se encuentra la capital de la no menos extensa comarca de la ribereña: Aranda de Duero.

La iglesia, de estilo gótico, construida en el siglo XV, conserva en su interior, entre otras obras de arte, un retablo del siglo XVII y un bellísimo púlpito renacentista, tallado por Miguel Espinosa y Juan de Cambray.
También gótica, aunque anterior a la de Santa María, es la iglesia de San Juan. Adorna su fachada una portada de arcos apuntados sostenidos por delicados capiteles, y una imagen posterior de San Juan Bautista. En la capilla de las Calderonas puede admirarse un retablo plateresco, con pinturas de un autor desconocido de principios del siglo XVI.
- Patrimonio histórico-artístico

El amplio patrimonio de Aranda de Duero cuenta actualmente con seis Bienes de Interés Cultural, que es la máxima distinción que otorga el Estado español a un bien ya sea mueble o inmueble.
El primero que vamos a repasar es la iglesia de Santa María la Real, una imponente construcción gótica levantada durante los siglos XV-XVI sobre los cimientos de una iglesia románica. Ubicado en el centro de la ciudad, este monumento sacro se construye debido al crecimiento de la población arandina, la cual necesitaba de un lugar más amplio para poder profesar su religión. En el tímpano de la propia iglesia podemos encontrar toda una colección de escenas religiosas tales como el Nacimiento de Jesús, la Epifanía, la Crucifixión, etc. Ya en el interior de la catedral, lo más llamativo para la vista es su preciosa escalera del coro, construida en el siglo XVI.
La segunda de las tres iglesias que ha recibido esta distinción es la iglesia de San Juan. De nuevo de estilo gótico y de nuevo localizada en el centro del municipio, su construcción comenzó en el siglo XIV y no terminaría hasta el siglo siguiente, tras la cual sucedió en 1473 la celebración del Concilio de Aranda, el evento histórico de mayor importancia que viviría este templo. Encima de la entrada al lugar, un altorrelieve de San Juan nos da la bienvenida a su interior, en el cual tres bóvedas se elevan, custodiando una de ellas un bonito retablo. En la actualidad, su interior acoge un Museo Sacro que contiene objetos religiosos e históricos que pertenecieron a la diócesis local.
La última de las tres es la románica iglesia de San Nicolás de Bari, situada en el centro del barrio de Sinovas fue sometida a una restauración en el año 2009. La iglesia esta compuesta por una nave y una portada románicas fechadas en el siglo XIII y que presentan unos canecillos superiores esculpidos en madera. En frente de la propia construcción, se hacen llamativas una serie de columnas renacentistas que forman un pequeño atrio. Ya en su interior, podemos encontrar dos fascinantes artesonados, uno realizado por el maestro Espinosa en el siglo XIV y otro de estilo mudéjar de los siglos XIII y XIV.
El que es sin duda el Bienes de Interés Cultural más característico de Aranda son sus bodegas subterráneas. Este impresionante entramado esta formado por 7 kilómetros de túneles y bodegas vinícolas excavados a una profundidad media de 12 metros en el subsuelo de la localidad, y cuya antigüedad varía entre los siglos XIV-XV. Construidas para producir y almacenar el vino a partir de la Edad Media, estas bodegas disponen de unas temperaturas y humedades constantes perfectas para conservar el caldo arandino, además de contar con un gran sistema de ventilación mediante el uso de zarceras. Pese a que la mayoría de estas bodegas son propiedad privada, aún existen muchas de ellas que se pueden visitar, formando uno de los mayores atractivos turísticos de la región.
El quinto de los bienes, aunque quizás menos impresionante que los anteriores pero no por ello menos importante e histórico, es el Rollo Jurisdiccional, ubicado en un principio en la Plaza Mayor pero traspasado a la Plaza del Rollo, se trata de uno de los varios rollos que existen por toda la península castellana y cuya principal función era la de simbolizar el privilegio de villazgo del que gozaba una población. Otro de los usos que fueron adoptando estas peculiares obras durante la época medieval fue la de la función de picota, lugar donde se exponían a los reos ajusticiados, ya que el uso de esta estaba en declive. En 1813 las Cortes de Cádiz ordenan mediante un decreto, la demolición de todos los rollos por su significado, que según estos refleja la vejación hacia el pueblo castellano, es por este derrumbamiento masivo por el cual hoy en día los rollos jurisdiccionales que quedan en pie son considerados como importantes monumentos históricos. Situado en la misma plaza que este curioso monolito se encuentra el Palacio de los Berdugo, una casa señorial castellana construida en el siglo XV por Martín de Durango y uno de los lugares donde permaneció Napoleón Bonaparte durante su estancia para ocupar España. Esta preciosa hacienda cuenta en su interior con un pequeño patio columnado en el que sobresale un brocal en su centro, además de un biblioteca y los diferentes emblemas heráldicos de las diferentes familias que habitaron en la casona.
Ya que hemos mencionado la Plaza del Rollo, es hora de ver la más importante de las plazas en la historia de Aranda, la Plaza Mayor. Surgida en el medievo como lugar común para celebraciones y festejos, no se incluyó dentro de los muros de la ciudad hasta el crecimiento de la misma, momento en el cual se empezaron a edificar casas a su alrededor, mostrando un aspecto más parecido al que luce en la actualidad. Con el paso de los siglos, los soportales que rodeaban el lugar fueron sustituidos por aceras y comenzaron a surgir diferentes puestos y negocios en sus inmediaciones.
El sexto y último del patrimonio galardonado que podrás visitar se encuentra en la localidad de La Aguilera y se trata de una colección de sargas sobre la vida de San Pedro Regalado. A este monje franciscano nacido en 1390 y originario de Valladolid se le atribuyeron en vida una serie de milagros que le valieron su canonización en el 1746, uno de los más famosos y que tiene su propia representación en una de las sargas narra como fue capaz de someter a un toro que había escapado de una corrida usando únicamente su voz, hecho que le valió para ser nombrado patrón de los toreros en 1951. Su actividad eclesiástica se desarrollo en los monasterios Domus Dei y Scala Coeli ubicados en La Aguilera y El Abrojo respectivamente, y de los cuales fue nombrado prelado en el 1422 tras la muerte de su principal mentor fray Pedro de Villacreces. De estos dos conventos solo el primero de ellos queda en pie hoy bajo el nombre de Santuario de San Pedro Regalado, que constituye una de las obras arquitectónicas más fascinantes de Aranda de Duero y en cuyo interior descansan los restos del santo, fallecido en el año 1456, junto al conjunto de sargas que narran hechos acontecidos a lo largo de su vida.
Más allá de estas fascinantes obras de arte, en Aranda se pueden encontrar otros bienes de interés, que aunque no posean la distinción de las anteriores, merecen y mucho la pena visitarlas.
Uno de estos son los Jardines de Don Diego, que constituyen una parte más moderna de nuestro patrimonio. Este hermoso monumento, inaugurado en 1930, que combina lo natural con lo artificial fue diseñado y construido por Emiliano Barral y Javier de Winthuysen en honor al político arandino Diego Arias de Miranda y Goytia. Otra de las más relevantes edificaciones de nuestro patrimonio es el Puente de las Tenerías, un puente construido en el medievo que cruza río Bañuelos y que nos ofrece unas esplendorosas vistas del mismo así como de la anteriormente mencionada iglesia de San Juan.
Además de las edificaciones ya mencionadas, el patrimonio histórico de Aranda cuenta con dos museos que nos ayudarán a entender mejor ciertos aspectos de la historia de este interesantísimo lugar. El primero que vamos a ver es el Museo del Tren, ubicado en la antigua estación Aranda de Duero – Chelva en donde se nos mostrarán diferentes piezas tales como, maquetas, uniformes, locomotoras, etc., que nos enseñarán la importancia que ha tenido este vehículo en la ciudad. El Museo de Juegos Tradicionales es el siguiente, aquí se nos presentará un espacio para recordar los pasamientos favoritos de las gentes de antaño en diferentes culturas.
Tras estos dos museos dedicados más a la historia, podremos encontrar tres que nos permitirán observar una perspectiva más artística de la ciudad. El Museo Casa de las Bolas es el más representativo en este área, este cuenta con una colección que, donada por el ingeniero Félix Cañada a nuestro ayuntamiento, se compone de diferentes pinturas que abarcan desde los siglos XVII-XX, además de acoger durante todo el año diferentes exposiciones artísticas. Sin embargo el edificio en el que se encuentra el propio museo cuenta también con una fascinante historia, la cual sitúa esta particular hacienda como lugar de residencia de Isabel I de Castilla durante su niñez entre los años 1461-1464. Otro de los museos que dedican su espacio al arte es el Museo de Arte Sacro, alojado en el interior de la iglesia de San Juan, esta antigua basílica guarda piezas que pertenecieron a la diócesis local y mediante las cuales podremos vislumbrar los diferentes aspectos religiosos que han acompañado a Aranda a lo largo de su historia. El último de estos museos es el Museo de Cerámica, en el que tal y como nos indica su propio nombre aprenderemos todos los campos relacionados con la alfarería, desde los diferentes tipos de fabricación, los diferentes tipos de vasijas y mucho más.
- Datos gastronómicos
La gastronomía de Aranda de Duero presenta una amplia variedad de platos llenos de tradición, sobre los que destacan nuestros dos principales pilares culinarios. Uno de ellos es el lechazo al estilo de Aranda, que recibe su nombre del cordero lechal y que es cocinado en un horno de leña y presentado en una cazuela de barro, tal y como mandan nuestras costumbres. La localidad arandina posee un gran abanico de restaurantes asadores que preparan este tradicional plato y todo tipo de asados, como las chuletillas de lechal, con los productos locales de mayor calidad.
El otro gran pilar de la gastronomía de Aranda son sus vinos, que disponen de su propia denominación de origen Ribera del Duero y cuya calidad es reconocida tanto a nivel nacional como a nivel mundial, no por nada Aranda de Duero ha sido reconocida como la Ciudad Europea del Vino durante los años 2020, 2021 y lo será nuevamente durante el 2022. Esta comarca ribereña brilla por su infinidad de viñedos y bodegas que se encargan de producir uno de los mejores caldos que podrás degustar en toda la península. A estos dos manjares solo queda añadirles el pan típico de la zona, la Torta de Aranda. Elaborada ya siglos atrás por los campesinos arandinos, esta torta junto a los ya mencionados lechazo y vino, nos ofrecen el menú más característico de todo el municipio de Aranda.
Pero no todo es lechazo y vino en Aran

da de Duero. Uno de los puntos fuertes culinarios de la región es el embutido, sobre todo la morcilla de la provincia de Burgos que tiene una gran fama en España y de la cual Aranda produce su propia variante, la Morcilla de Aranda. Esta variedad local se diferencia de las demás por el uso de ciertas especias y por su doble cocción, las cuales la otorgan de un sabor característico y de una mayor ligereza a la hora de ser comida. Del proceso fabricación de esta morcilla se puede obtener uno de los guisos con mayor tradición de la ribera, el calducho. Obtenido del caldo resultante de la cocción de las morcillas al que se le añaden algunas rebanadas de pan, este alimento ha sido parte fundamental en las vidas de nuestros antepasados y a día de hoy aún lo sigue siendo en nuestra cultura. Junto al calducho, la sopa de ajo es otro de nuestros platos más tradicionales y humildes que los campesinos de nuestra tierra consumían habitualmente, y sin los que hoy en día sería imposible describir nuestra historia culinaria.
Un elemento sin el que no se podría entender nuestra gastronomía es el queso de oveja. Aranda cuenta con una ganadería ovina que es tradición en la zona desde siempre, y que es fuente de los muchos quesos con una denominación de origen única, Quesos Región del Duero, que son preparados por nuestros artesanos de formas muy diversas y que suelen acompañar en la mesa a una buena copa de vino ribereño.
Los productos de temporada también conforman un grupo imprescindible a la hora de preparar nuestra comida. La ribera dispone de una gran gama de hongos, los cuales son usados en un sinfín de recetas como revueltos, guisos, tortillas, etc. Otros productos de temporada característicos de la Ribera del Duero son los derivados de la caza de pelo y pluma, carnes como la de codorniz, perdiz, liebre, corzo y jabalí unen a nuestra naturaleza más salvaje con nuestra cocina para crear multitud de sabores que hacen a las carnes de Aranda variadas y de una gran calidad.
El amplio espectro culinario del que disponemos en la ribera no solo se centra en la carne, también en el pescado. Al estar en contacto tanto del río Duero como de varios de sus afluentes, Aranda disfruta de gran variedad de pescados a su disposición para nutrir, aún más, su ya amplia cocina. Curiosamente, el pescado que más destaca en nuestro recetario se encuentra en el mar, no en el Duero. El Congrio a la Arandina es un plato que, pese al pescado que usa, nos ha ido pasando de generación en generación y que hoy en día constituye uno de los alimentos más característicos de nuestra cocina.
Por último, es obligatorio detenerse en los postres que nos brinda Aranda de Duero. Los empiñonados son uno de los más característicos de nuestra historia, se trata de un dulce que toma su nombre de uno de sus ingredientes, los piñones, y que se empezaron a producir hace más de 60 años por un pastelero local. Además podrás disfrutar de otros postres típicos como las famosas rosquillas ciegas, el arroz con leche y otra infinidad de postres que podrás descubrir recorriendo nuestra ciudad.
Fiestas y celebraciones
Uno de los ingredientes más importantes de los que se compone el patrimonio de un lugar son sus celebraciones y festejos, y en Aranda no iba a ser menos, de hecho algunas como la Bajada del Ángel han sido nombradas de Interés Turístico Nacional. Esta ceremonia, festejada el domingo de pascua, data del siglo XV y en ella un niño vestido de ángel le quita el velo a la Virgen de las Candelas desde las alturas, colgado mediante unos cables.
Otra tradicional celebración es la ocurrida durante el segundo fin de semana de Junio, donde se representa por medio del teatro el Concilio de Aranda de 1473, uno de los acontecimientos más emblemáticos de nuestra historia local.
Una de nuestras celebraciones más característicos es la Procesión de la Cruz de Mayo, en donde nuestras gentes portan una gran cruz a hombros desde la iglesia de San Juan hasta la Plaza Mayor mientras el resto de Aranda danza e implora por agua para sus cosechas.
Algo que no se puede no mencionar son nuestras fiestas patronales, las Fiestas Patronales de Aranda de Duero que comienzan la segunda semana de septiembre con el cañonazo y finaliza con el entierro y la despedida tras nueve días de fiestas para honrar a la Virgen de las Viñas, nuestra patrona de la ciudad. Pero estas no son nuestras únicas celebraciones, todos los años celebramos certámenes relacionados con el vino, lechazo, etc., uno de los mercados medievales más grandes del país y mucho más que desde aquí te invitamos a descubrir o el Festival de Música, referencia nacional, de Sonorama Ribera del Duero.
Lo último que queda por repasar es el diverso y bonito patrimonio natural que nos ofrecen los paisajes de la ribera, desde el Canal de Riaza hasta su desembocadura en el Duero, pasando por los campos de vides arandinos, además de diversos valles y llanuras que son enriquecidos con la fauna que nos deleita la ribera. Para poder deleitarse con semejante belleza existe un trayecto del denominado Camino Natural Senda del Duero, que transcurre desde Aranda de Duero hasta Roa de Duero, una oportunidad imperdible de observar la bonita naturaleza que nos ofrece el paisaje ribereño.
- El entorno paisajístico
Aranda de Duero es atravesada por el río Duero y por dos de sus afluentes, el río Arandilla y el río Bañuelos. Este acontecimiento ha hecho de los puentes arandinos uno de los aspectos más característicos de la ciudad. Con construcciones de todas las épocas sobre las que destaca el románico Puente de las Tenerías, usado desde la Edad Media para cruzar el río Bañuelos. Pero la confluencia de estos tres ríos no solo ha afectado a la estética de la ciudad, pues existen varias actividades que se pueden realizar, ya sea desde pasear tranquilamente en barca hasta practicar piragüismo, que nos permitirán observar mejor la belleza de estos paisajes fluviales, así como de su naturaleza. Dentro de la ciudad, también existen un gran número de jardines y paseos que nos permitirán apreciar y admirar una mezcla entre la ciudad y la naturaleza.
El otro aspecto más característico de nuestro entorno natural son nuestras grandes extensiones de viñedos, que descansando sobre un terreno fértil, nos ofrecen uno de los vinos más prestigiosos y reconocidos a nivel mundial como son los Ribera del Duero. Actualmente existen infinidad de rutas o guías que nos permiten recorrer nuestros campos de vides y bodegas con el objetivo de observar la belleza de los campos y conocer más sobre la elaboración del vino, parte indispensable de la cultura y la historia de Aranda.
Pero si lo que queremos es disfrutar de la naturaleza más pura, Aranda de Duero nos ofrece varias alternativas. Una de ellas es el Monte de la Calabaza, un lugar lleno de naturaleza donde podremos observar su variada fauna entre la que se encuentran desde pequeños animales como tejones, conejos o zorros hasta animales de mayor tamaño como jabalíes o corzos. Por otra parte también podremos examinar su flora, todavía más diversa y numerosa, como pinos, encinas, diferentes especies de matorrales, etc.
Por último La Senda del Duero nos ofrece un sendero, el GR-14, una ruta que nos llevará por las orillas del río mismo, pudiendo deleitarnos con los paisajes y con el ecosistema que nos brinda la ribera. Siguiendo esta senda también podremos observar algunos de los viñedos más importantes de la zona, así como diferentes lugares y monumentos de gran valor histórico para la zona de la Ribera del Duero.
